“Enséñanos a orar”: Año de la oración 2024

Jueves 29 de Agosto del 2024
El Papa Francisco ha promulgado el año de la oración, como una manera de preparar al pueblo de Dios al Jubileo 2025, invitándonos así a descubrir esta experiencia de gracia como un verdadero respiro del alma.

Este período está “dedicado a redescubrir el gran valor y la absoluta necesidad de la oración en la vida personal, en la vida de la Iglesia y en el mundo” (Ángelus 21 de enero 2024). Bajo el lema “enséñanos a orar” (Lc 11,1), la Iglesia nos invita a caminar como discípulos que aprenden a rezar en la escuela de Jesús. Quisiéramos valorar como esta práctica de Oración se ha prolongado a lo largo de los siglos a través de las diversas experiencias orantes atestiguadas en la fecunda tradición de la Iglesia.

El Santo Padre, llamándonos a orar más y mejor, nos invita no solo a una práctica de devoción milenaria, sino que además nos anima a descubrir esta experiencia de diálogo personal con Dios en donde se hace posible que el creyente se abra a la voluntad del Señor. 

En sus catequesis, el Papa ha indicado en varias ocasiones cómo la oración es el camino para entrar en contacto con la verdad más profunda de nosotros mismos, donde está presente la luz misma de Dios, como enseñaba san Agustín. Nos motiva a orar con perseverancia, subrayando el poder transformador de la persona y la comunidad que esta tiene.

En la Introducción a la Serie de Apuntes sobre la oración preparada por el Dicasterio para la Evangelización, el Papa explica que este año dedicado a la oración no desvirtúa en absoluto las iniciativas particulares. Por el contrario, recuerda el fundamento sobre el cual deben desarrollarse y encontrar consistencia los diversos planes pastorales, la actualidad de Jesucristo. Es un tiempo para redescubrir, tanto personalmente como en comunidad, la alegría de la oración en su variedad de formas y expresiones. Es un tiempo significativo para incrementar la certeza de nuestra fe y la confianza en la intercesión de la Virgen María y de los santos. Es, en definitiva, un año para vivir una especie de “escuela de oración”, sin dar nada por obvio o por sentado, especialmente en lo que se refiere a nuestro modo de orar, sino cada día haciendo nuestras las palabras de los discípulos cuando le pidieron a Jesús: “Señor, enséñanos a orar” (Lc 11,1).

En este año, continúa el Papa, estamos invitados a hacernos más humildes y darle un mayor espacio a la oración que surge del Espíritu Santo. Es Él quien sabe poner en nuestro corazón y en nuestros labios las palabras correctas para que seamos escuchados por el Padre. La oración en el Espíritu Santo es la que nos une a Jesús y nos permite adherir a la voluntad del Padre. El Espíritu es el Maestro interior que nos muestra el camino a seguir; gracias a Él, la oración de uno solo puede convertirse en la oración de toda la Iglesia, y viceversa. Nada como la oración según el Espíritu Santo hace que los cristianos se sientan unidos como familia de Dios, que sabe reconocer las necesidades de cada uno, para que juntos se conviertan e intercedan por todos.

Que la oración sea, por lo tanto, la brújula que orienta, la luz que ilumina el camino y la fuerza que sostiene en la peregrinación que conducirá a cruzar la Puerta Santa. A través de la oración, podremos llegar con un corazón preparado para acoger los dones de gracia y de perdón que el Jubileo nos ofrecerá, en cuanto expresión viva de nuestra relación con Dios. Sumerjámonos, pues, con la oración, en un diálogo continuo con el Creador, descubriendo la alegría del silencio, la paz del abandono y la fuerza de la intercesión en la comunión de los santos.

Para preparar este año de la oración, el “Secretariado pastoral de la Conferencia Episcopal de Chile” ha puesto a disposición un especial web sobre el Año de la oración 2024, con el cual se quiere ayudar a renovar el espíritu de oración en todos aquellos contextos que estamos llamados a vivir cotidianamente. La sección “Recursos” contiene subsidios formativos y fichas para la reflexión personal y/o comunitaria; la sección “Testimonios” nos irá presentando distintas expresiones, formas y vivencias de la oración; y la sección “Iniciativas”, quiere ser un espacio que recoja la riqueza de las comunidades a lo largo de todo Chile. Así compartimos con ustedes lo que parroquias, instituciones de educación superior, colegios, Movimientos, etc., hayan realizado o tengan programado, relativo al año de la oración como son: retiros, talleres, adoración al Santísimo, peregrinaciones a un Santuario o visita a una comunidad contemplativa, entre otras, las cuales pueden enviar al correo electrónico: secretariado.pastoral@conferenciaepiscopal.cl

La oración será también la oportunidad para elevar juntos, a manera de una gran sinfonía, una oración común de agradecimiento a Dios por los múltiples dones de su amor.

Te Invitamos a visitar: Especial año de la oración 2024 https://www.iglesia.cl/oracion2024/

SERVICIO - Revista de la Conferencia Episcopal de Chile